Vacíos

Cada persona es un cofre lleno de cosas asombrosas por descubrir, de todo lo que ha ido metiendo a lo largo de su vida, restos de los caminos que ha ido tomando y que sin duda merecen ser conocidos.

Estas experiencias son las que poco a poco forman tu personalidad, tu manera de pensar. Te ayudan a conocerte a ti mismo y te forman como lo que quieres ser. Así cuando una persona te quiera conocer, te abrirá y verá todo lo que eres, lo que has llegado a ser.

Esto debería ser así en todos los casos, pero lamentablemente cada vez lo es menos. En los tiempos que corren la mayoría de las personas deciden recurrir al enorme baúl. En éste hay personas que meten su insignificante cofre, el cual antes de abrir ya sabes que está vacío. O sino lo está, lo que hay dentro no ha sido introducido por ellos, al menos no voluntariamente sino inducidos.

Además una vez visto el contenido de uno de ellos, ya puedes afirmar, sin duda alguna, que el resto de cofres contienen exactamente lo mismo. No supone ningún reto el explorarlos, no levantan ningún interés. Podrán vivir acompañados de otros cofres y protegidos por el enorme baúl que los contiene, pero nunca serán libres, no tendrán vida propia. Irán adonde el enorme baúl les lleve, contendrán lo que el baúl contenga, no decidirán por si mismos.

Una vez su cofre se encuentre en el interior del enorme baúl, serán incapaces de acceder a él, pues el baúl se lo impide. El baúl controla todos los cofres y les dicta como deben de comportarse, como han de ser.

Tú decides si quieres ser un cofre libre con capacidad para explorar otros cofres y decidir cual realmente te interesa y con cual quieres compartir tu tiempo; o si te metes en el enorme baúl para no preocuparte del exterior y para así estar ligado a sus movimientos y a los pensamientos que éste contiene y que estas obligado a adoptar.

Estarás obligado a actuar y pensar lo que el enorme baúl te indique, pues si no serás expulsado y te veras al desnudo ante la realidad, no sabrás donde ir después de tanto tiempo atado al grupo que tiraba de ti. Te encontraras vació, pues no has podido llenar tu cofre de tus principios, de tus ideales, pues no los tenías. No te dejaban tenerlos, ellos te dictaban que debías tener, que debías ser.

Ý ahora fuera de ese mundo, observas que la gente no se acerca a ti, pues no hay nada que ver. Demasiado tiempo a la sombra...

Deja de interpretar. Ten valor para ser tú mismo. Ten valor para decidir sobre ti mismo.

No seas uno más...

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Dedicado: A todo aquel que en algún momento de su vida se ha sentido sólo por no formar parte del rebaño, que le decía como debía ser y como debía actuar.

Alma libre,

DaCoX